Sólo iba a aparecer en tres capítulos para dejar muda a Alba (Betiana Blum), pero con tantos hechizos exitosos, Concepción (Julia Calvo), la bruja de Soy gitano (a las 22, por Canal 13), se convirtió en un personaje necesario para la tira. En un bien y un mal necesario.
Todos recurren a ella para matar a alguna enemiga amante, para poder entrar en sueños ajenos, para transmitir enfermedades, en fin, para hacer hechizos, videncias y rituales de todo tipo.
Es la primera vez que Julia hace una tira televisiva. Cuenta que cada mañana se levanta y dice ¡Gracia Dió! como la canción de Javier Calamaro en la apertura del melodrama.
Ya pasaron mas de tres capítulos y ahora sos una figura clave.
Y lo más interesante es que cuando los directores vieron que se ponía fuerte el personaje apostaron a esto en la novela. El tema de los hechizos y los maleficios está muy presente en el público.
Me parece muy importante que a la prensa también le interese esto, que tiene mucho de cuento.
Además, me gusta que gran parte del público sean chicos. Trabajé con ellos mucho tiempo y nunca pensé que me verían a las diez de la noche, en un programa que tiene escenas muy fuertes.
¿Es la primera vez que hacés tele?
Con esta continuidad, sí. Hice algunos capítulos sueltos: en total fueron quince y tengo 42 años. En general, siempre estuve más vinculada al teatro que a la televisión.
¿Y te gusta la ficción de la TV?
Me encanta, porque estoy aprendiendo cosas todos los días. A veces creo que es medio cursi pensar en que “nunca es tarde”, pero me parece que está bueno, sobre todo para algunos compañeros que todavía no descubrieron esto.
Nunca es tarde, porque en algún momento las cosas se dan.
¿Con tus compañeros actuales, ya habías trabajado?
No. Sólo me crucé con Julieta Díaz el año pasado, en un capítulo en el que participé de 099 Central (Canal 13), donde hice el personaje de la psicóloga de la brigada.
¿Te resultó dificil adaptarte a los tiempos de la tele?
No sé si difícil. Es distinto al teatro, pero esto que estoy haciendo es como un curso acelerado de televisión. No paro de aprender, que es lo más lindo.
¿Cuándo empezaste con el teatro?
En el 83 hice mi primer estreno.
Soy socia de la Asociación Argentina de Actores desde hace 20 años. Empecé trabajando con Pepito Cibrián. También integré un grupo que se llamaba El Teatrito, trabajamos mucho en el Cervantes y en el San Martín. Vengo de un teatro donde se trabaja muy parecido a esto –la tele–, con un muy buen clima, por un proyecto en común.
Una nueva “disputa” en TV:
En Padre coraje, la tira que Pol-ka prepara el año que viene para las 22 (con Facundo Arana, Nancy Dupláa y Carina Zampini), Julia Calvo será la dueña de un prostíbulo de los años 50. “Ya estuve hablando con mi mamá y mi abuela y me contaron varias cosas de esa época. Así, voy creando el personaje desde ahora. Aunque ya tengo un poco de monja, de bruja y también de prostituta adentro (risas) y lo que me haga falta saber lo aprenderé”.
Dice que no es muy creativa para proponer cosas, pero que es buena mano de obra: “A mí me muestran la cancha, me dicen cuál es mi raqueta y ahí pruebo y voy viendo cómo va siendo el personaje”, cuenta.
Cuando hizo de caribeña en la obra Tempestad no la mandaron a Cuba para tomar el tono, pero dice que se acordó de Celia Cruz y de Amelita Vargas y se largó. “Así somos los actores, una vez que nos instalamos y nos sentimos cómodos, sale todo de adentro, pero es fundamental ese proceso”, reconoce la actriz.
Fuente: Clarín Espectáculos

No hay comentarios. :
Publicar un comentario